Ni la actual, tampoco la de la IV República y mucho menos la bolivariana. La democracia “made in” EEUU es la forma de gobierno que la mayoría de los venezolanos prefiere.
Según el último estudio de opinión pública divulgada por la firma Eugenio Escuela, 37,18% de los venezolanos se identifica con el estilo de gobierno estadounidense, mientras 17,33% prefiere vivir en un sistema democrático “como el actual” y 11,82% aspira a evolucionar a regímenes similares a los europeos.
Sólo 8,47% se decanta por volver a los modelos gubernamentales que existían antes de la llegada de Hugo Chávez a la Presidencia de la República y 5,43% prefiere apoyar el sistema de gobierno que la encuestadora califica como “Democracia Bolivariana”.
A pesar del rechazo al modelo actual _y la propuesta de evolución de éste_ el primer mandatario nacional continúa capitalizando un amplio respaldo, al punto que 60,9% de los venezolanos evalúa su gestión entre muy buena y regular hacia buena (ver infografía anexa).
¿Cómo es posible que se apoye la labor del Presidente y no el modelo que gestiona? La explicación a este interrogante puede encontrarse en el círculo de colaboradores designados por Chávez. Para 84,20% de los venezolanos la gestión de los funcionarios más cercanos a Miraflores (ministros, presidentes de compañías o instituciones del Estado) debe catalogarse “entre mala y regular hacia mala”.
¿Qué aspectos positivos se identifican en la gestión presidencial? Para 37,97% la implantación de las misiones es la mejor obra de gobierno. Destaca en este apartado que el segundo grupo de opinión en importancia porcentual (21,70%) coincide en responder que no existen aspectos positivos que resaltar; mientras 17,29% identifica la ayuda a los pobres como un aspecto positivo. “El rescate” de Pdvsa sólo es valorado por 4,75% de los entrevistados.
¿La oposición tiene aspectos positivos? Para la mayoría de los entrevistados (49,40%) los factores “anti-Chávez” carecen de elementos que puedan resaltarse, principalmente porque identifican en sus líderes los siguientes defectos: “están divididos, son agresivos, violentos, no dejan trabajar a Chávez y son golpistas”.
Confianza a medias Mientras 55,22% de los entrevistados asegura confiar en el presidente Chávez, 40,42% rechaza la posibilidad de otorgar su respaldo a las gestiones que pueda desarrollar el primer mandatario nacional.
La confianza que genera Chávez continúa siendo directamente proporcional al estrato social de los encuestados. En el grupo que dice confiar se observa una tendencia a disminuir el porcentaje a medida que sube “la clasificación social” del entrevistado. En el estrato E el porcentaje de apoyo se ubica en 86,96%; baja a 55,10% en el estrato D; disminuye a 50,77% en el estrato C y termina en 45% en la clase AB.
Por ubicación geográfica los habitantes de oriente son los que más confían (58,89%), seguidos de los residentes en la zona central (55%), los Andes (53,25%) y la zona petrolera (48,10%). En términos porcentuales el registro más bajo se ubica en la zona metropolitana donde sólo 39,89% confía en Chávez.
Apoyo al CNE El caso del Consejo Nacional Electoral (CNE), la firma Eugenio Escuela destaca que 49,2% de los entrevistados confían en la directiva del Poder Electoral, opinión que no comparte 32,5% de la población. A diferencia de lo que ocurre con el presidente Chávez la confianza en el organismo comicial es superior en los estratos sociales altos.
Del grupo que asegura confiar en el nuevo CNE se observa una tendencia a disminuir el porcentaje a medida que baja el nivel del entrevistado: estrato AB (78,26%); estrato C (54,69%); estrato D (46,55%) y estrato E (46,00%).
Paradójicamente, el Poder Legislativo _instancia que designó al nuevo CNE_ sólo genera confianza a 15,27% de la población.