El peor escenario para la oposición es el de capitalizar sólo 38 diputados

Las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre marcarán el futuro del proyecto político de Hugo Chávez, de ahí la importancia que oposición y chavismo conceden a este proceso electoral. Utilizando como referencia el resultado del referendo constitucional del 15 de febrero de 2009 se pueden vislumbrar, al menos, tres escenarios para la elección del nuevo Parlamento.
Suponiendo que la votación de este proceso constitucional se repita el 26 de septiembre en todas las parroquias y que sólo se presenten dos bloques de candidatos, incluida la unidad absoluta de la Mesa de Unidad con los otros liderazgos políticos para los candidatos nominales y alianzas perfectas para las listas, el peor escenario para los adversarios del Ejecutivo Nacional -por ende el mejor para el chavismo- es que la oposición solo logre obtener 38 diputados, de éstos, 19 serían nominales y 19 tipo lista.
Estos diputados son los que teóricamente están asegurados por la votación histórica de algunas zonas como -por citar un ejemplo- los dos diputados que deben escoger en la circunscripción conformado por El Hatillo, Baruta, Chacao y la parroquia Leoncio Martínez del municipio Sucre.
En este ejercicio de simulación de resultados no se toman en consideración variables como el desgaste político de los bloques en disputa; no obstante, los técnicos electorales de la Mesa de Unidad coinciden en identificar, al menos, 23 circunscripciones en donde sería probable el triunfo de la oposición. En estas zonas el chavismo ganó el 15 de febrero por márgenes que oscilan entre 1 y 5 puntos porcentuales, lo que hace suponer que candidatos de unidad, con una agenda alternativa que conecte con los indecisos y el chavismo light podrían revertir esta tendencia (ver infografía anexa)
Los estados que cuentan con circunscripciones de estas características son: Anzoátegui, Aragua, Falcón, Mérida, Nueva Esparta, Táchira, Yaracuy, Zulia y el Distrito Capital.
Si la oposición logra concretar el triunfo en estas 23 circunscripciones, la proyección de resultados le otorgaría 63 diputados -39% de la nueva Asamblea Nacional- cantidad suficiente para romper la mayoría calificada en el Parlamento; indispensable para aprobar leyes de carácter orgánico.
En el tercer escenario se consideran sólo las circunscripciones “alcanzables”, caracterizadas por zonas en donde el chavismo triunfó el 15 de febrero por márgenes que oscilan entre 6 y 10 puntos porcentuales. En este caso son 25 circunscripciones en que la oposición deberá revertir la tendencia de votación. Si se suman los diputados seguros, a los probables y alcanzables -incluidas cuatro listas adicionales- los adversarios del chavismo podrían obtener hasta 90 curules, lo que equivale a 54,5% del total de diputados.
Esta cantidad de diputados es suficiente para elegir a los nuevos magistrados del Tribunal Supremo de Justicia o para aprobar leyes que no tengan carácter orgánico.