La descarga de la información contenida en las máquinas de votación utilizadas el 14 de abril —indispensable para ratificar o negar las denuncias presentadas por Henrique Capriles Radonski— se realiza sin la presencia, ni aval de los técnicos de la oposición.
En una comunicación que será entregada a la presidenta del Poder Electoral Tibisay Lucena, el secretario general de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo rechaza “enfáticamente la decisión del CNE de impedir la presencia de nuestros representantes en el proceso de repliegue de la información”.
En la comunicación Aveledo explica: “La solicitud de nuestros representantes de incorporar observaciones al acta de esa actividad, o incluso la negativa a firmar dicha acta ante la negativa del CNE a aceptar las observaciones no puede ser causante de una decisión de tal naturaleza”.
La misiva sirve para ratificar a Lucena que los datos contenidos en las máquinas de votación y las memorias extraíbles utilizados el 14 de abril de 2013 “es información electoral fundamental para el análisis, auditorías y ajustes del sistema de votación, de verificación de la identidad biométrica así como para la auditoría de no duplicidad de huellas dactilares (…) Garantizar la integridad de esa información es elemento fundamental para la verificación del proceso electoral”.
El proceso de repliegue que realiza el CNE desde la semana pasada implica que la información recuperada de las memorias extraíbles sea enviada a un servidor “conectado en red con varias estaciones de trabajo, de las cuales los representantes de las organizaciones políticas no tienen información, ni control de las actividades que realizan, lo cual origina que esa información recuperada no pueda verificarse que sea manejada en forma segura”.
Advierte Aveledo que al efectuarse el procedimiento de descarga sin la presencia de técnicos de la oposición “los representantes de las organizaciones políticas no podemos testimoniar su integridad frente al país así como tampoco podríamos afirmar que esa información se corresponde en forma fidedigna con la recuperada de las referidas memorias extraíbles, más allá de la palabra de los técnicos de la autoridad electoral”.
Relata el secretario general de la MUD en su misiva que los representantes del CNE en la descarga de información “condicionaron, que si nuestro representante no firmaba el acta de la actividad indicando su conformidad con las características del procedimiento utilizado, su presencia en las auditorías posteriores no sería permitida, como de hecho le impidió su acceso a las instalaciones del CNE y no se le permitió asistir a las actividades de repliegue de información a partir de esa fecha, 21 de junio de 2013”.
Aveledo sostiene que esta postura del CNE viola lo establecido en el artículo 158 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales, en el cual se establece que los testigos no podrán ser coartados en el cumplimiento de sus funciones por los miembros de los organismos electorales subalternos correspondientes”.
Recuerda Aveledo a la presidenta del CNE que la información contenida en las máquinas y las memorias extraíbles utilizados el 14 de abril “son datos electorales fundamentales y estrechamente relacionados a las demandas que cursan actualmente ante el Tribunal Supremo de Justicia, por lo cual y de conformidad con lo establecido en el artículo 169 de la LOPE deben ser preservados en forma adecuada por parte del CNE y nosotros tenemos el derecho político de verificarlo”.
La oposición exige al CNE que garantice la preservación adecuada de todos los elementos que contengan información de la elección del 14 de abril, le permita a sus técnicos verificar la información que ya fue replegada, “se restablezca el derecho de nuestros representantes, a dejar constancia en las actas de cualquier observación sobre el desarrollo de las actividades, sin coacción por parte de ningún funcionario del CNE, independientemente de que los funcionarios de esa institución o representantes de otras organizaciones políticas compartan esas observaciones o no”.

Jun 26 Reclamo exclusión auditoría repliegue