Los posibles desenlaces del colapso que sufre Venezuela ayudan a entender el proceso que vive el país y a poner sobre la mesa las oportunidades reales para que se produzca un cambio político.

El politólogo y MSc. en Ciencias Políticas John Magdaleno sostiene que en este momento existen tres desenlaces posibles: 1) Reequilibramiento del régimen; 2) Transición por colapso, y; 3) Transición negociada.

Según Magdaleno el reequilibramiento puede generarse por la vía de la fuerza o la abierta violación de la Constitución, en este desenlace la consolidación de un régimen autoritario en Venezuela es casi inevitable. En el caso de la transición por colapso esta podría generarse por el comportamiento autoritario del gobierno de Maduro y su disputa con la Fiscal General y cualquier otro disidente de la colación gobernante. Este enfrentamiento –desde la perspectiva de Magdaleno– puede propiciar una crisis política mayor que desencadenaría una ruptura o fractura de la coalición gobernante.

Sin embargo, para el politólogo esta fractura “no ocurrirá en lo inmediato”, aunque advierte que en la medida en que el gobierno “siga elevando los costos a cualquier disidencia interna, en el fondo lo que están haciendo, de una forma consciente o no, es promover actores desleales o semi-leales al sistema”.

El tercer desenlace posible, el inicio de una transición pudiese ocurrir por un colapso del régimen político o por una negociación. Magdaleno recuerda que cuando se examinan los casos de transiciones en América Latina y algunos de Europa, la mayoría de estos procesos se producen por negociación política. “No necesariamente una negociación con los actores del gobierno, sino con actores militares y otros integrantes del gobierno”.

Los tres posibles desenlaces que Magdaleno proyecta para Venezuela van tomando cuerpo entre los distintos “tableros” en que se está desarrollando el enfrentamiento con el régimen de Maduro.

  • Opinión pública nacional
  • Movilización social, que no es solo marchas y concentraciones. Sino que se refiere al saldo organizativo que se está creando.
  • Opinión pública internacional.
  • Organismo multilaterales
  • Presidencias y parlamentos de otros países
  • Interlocución con sectores del chavismo descontento
  • Sector empresarial
  • Iglesias del país
  • Fuerza Armada Nacional

El politólogo advierte que si la oposición y el chavismo descontento “no juntan fuerzas, la posibilidad de un cambio político en el país disminuye. Deben lograr algún tipo de interlocución para elevar las posibilidades de un cambio (…) la pregunta es si hay tiempo antes del 30 de julio para que los acuerdos latentes entre oposición y chavismo descontento se materialicen”.

Aunque Magdaleno indica que el rechazo a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) es superior al 70%, admite que en este momento lo que puede considerarse como mas probable “es que se instale la ANC (…) ahora, si eso ocurre los incentivos para que se produzcan más fracturas son mucho mayores”.

Magdaleno explica que esos incentivos están asociados a varios hitos que rodean a la ANC:

  • Se va instalar sin la consulta previa, cuando 80% de los venezolanos aspiraba a que se realizara un referendo previo
  • Elección de los constituyentes. Bien sea por las individuales o por la foto de conjunto, los delegados a la ANC pueden generar rechazo en la población.
  • Actos administrativos que han sido anunciados: destitución de la Fiscal, modificación institucional, disolución del Parlamento, van a generar rechazo incluso entre la coalición dominante, especialmente si se comienza a filtrar el contenido de las reformas que se piensan implementar
  • Eliminación de la elección presidencial de 2018.

Por otra parte, Magdaleno recuerda que una mayoría abierta de entrevistados en las encuestas “está de acuerdo con la noción de una gobierno de unidad nacional, porque se entiende que puede ser el principio de un proceso de reconciliación nacional”.

La medida de casa por cárcel para Leopoldo López y la forma en que él y su partido se comporten en el futuro puede acercar o aumentar las probabilidades de ocurrencia del reequilibramiento del régimen; la transición por colapso, o la transición negociada, especialmente si se comenten errores graves (de cualquiera de los bandos) se puede acelerar el quiebre del gobierno de Maduro o su reequilibramiento.

La ANC implicará mayor radicalización

Luis Vicente León, director de la firma encuestadora Datanálisis sostiene que a la fecha existen tres escenarios bases para Venezuela: El primero de éstos sugiere que el chavismo logra imponer su iniciativa de Asamblea Nacional Constituyente, lo que implica mayor radicalización y la destrucción de los principales símbolos opositores. En este escenario el país puede terminar controlado desde un Sóviet Supremo por varios años.

En el segundo escenario se puede prever que la masificación de la protestas generará una fractura importante dentro del chavismo, lo que pudiese obligar al sector militar a tutelar un cambio, en donde no estarán los opositores clásicos, sino individualidades mucho más moderadas.

<b>La presión de las protestas callejeras, que se han mantenido durante más de 100 días, generan una percepción aún más negativa del régimen de Nicolás Maduro.</b>
La presión de las protestas callejeras, que se han mantenido durante más de 100 días, generan una percepción aún más negativa del régimen de Nicolás Maduro.

El tercer escenario se refiere a la posibilidad de un golpe militar convencional.

Según León, al asignar probabilidades de ocurrencia a cada uno de estos escenarios, la primera probabilidad recae en la imposición de la ANC, mientras que menos probabilidades obtiene la posibilidad de un cambio tutelado por los militares. La posibilidad de un golpe militar no tiene, por los momentos, una alta probabilidad de ocurrir.

La reciente medida del régimen de Nicolás Maduro de otorgar casa por cárcel a Leopoldo López no modifica en estos primeros días los escenarios planteados.

Desde la perspectiva del director de Datanálisis es evidente que el gobierno quiere dar con esta decisión un mensaje de apertura y está respondiendo a la presión del ex jefe del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y otros negociadores.

Según León esta decisión pudo precipitarse por la toma violenta de la Asamblea Nacional el pasado 5 de julio, acción que fue “demoledora en términos de imagen” para Maduro.

Sin embargo, el analista insiste en que las negociaciones “a las que puede estar dispuesto el gobierno están lejos de lo que aspira a lograr la oposición y especialmente la base opositora que actúa como si hubiera ganado y realmente está lejos de eso”.

Para el director de Datanálisis es importante recordar que el gobierno “tratará de bajar la presión, es su objetivo (…) y a una parte de la oposición le puede convenir porque sabe que va a una situación de perder perder. Pero las negociaciones no van a incluir nada que arriesgue la salida del Gobierno y las fracturas en gobierno y oposición van a ser mayores en estas decisiones y eso siempre es muy inestable”.

Imposible dejar de negociar

Según Jesús Seguías presidente de la firma de medición de opinión pública Datincorp ni la oposición ni el gobierno de Maduro pueden pulverizarse mutuamente. “El `todo o nada´ y una salida Ganar-Perder ya no son viables, pues todos saldrán perdiendo. Ambos cuentan a su favor con importantes factores de poder, pero igualmente lucen un cuadro de debilidades que opacan sus fortalezas”.

En un análisis titulado “Bájense del ring”, Seguías sostiene que “casi todos los factores políticos venezolanos están enfocados en la confrontación para el control del poder, por tanto están alejados del objetivo y de lo que está reclamando el país”.

Para Seguías “el foco correcto de ambos factores políticos debe apuntar prioritariamente a la solución de la crisis y no a dilucidar el control del poder.Ningún factor político, de los que hoy están confrontados por el poder, podrá resolver la crisis sin el concurso y consentimiento de la otra parte”.

El presidente de Datincorp sostiene que aunque algunos políticos (la oposición, por ejemplo) podrían alcanzar algunas importantes cuotas de poder, o todo el poder, no podrán por sí solos con el peso de la crisis. Ésta los devorará”.

Según Seguías lo primero que tienen que ensayar tanto chavistas como opositores es bajarse del ring de combate. “Eso no significa que tengan que renunciar a sus postulados políticos e ideológicos. Se trata simplemente de activar un plan marcado por mucho pragmatismo para comenzar a generar escenarios sinérgicos de mutuo reconocimiento, para el obligado diálogo que implica la solución de la fase crítica”.

El fin último de un proceso de “conversaciones cruciales”, con micrófono apagado, entre chavistas, opositores y los que no pertenecen a ningún bloque político, debe ser el de establecer un gobierno de Unidad Nacional, transitorio, para que ambos factores de poder asuman por igual el costo político de las medidas de ajuste económico.

En este escenario Seguías sostiene que “las fuerzas armadas por razones constitucionales serán soporte fundamental del entendimiento más no deben ser los protagonistas del proceso de cambios consensuales”.

Con López evitan una reacción internacional

Según el análisis de Francisco Rodríguez, directo de la firma de inversión Torino Capital, aunque la medida de casa por cárcel para Leopoldo López puede interpretarse como parte de un intento del Gobierno para retomar las conversaciones con la oposición, “también podría leerse como un movimiento táctico para evitar una reacción internacional más amplia”.

Según Rodríguez, “la comunidad internacional parece lista para paralizar la implementación de medidas de presión internacional si existiese alguna posibilidad de negociación exitosa entre el gobierno y la oposición”.

No obstante, el director de Torino Capital no descarta que Maduro decida avanzar con la ANC para “tener como carta de negociación la posibilidad de ejercer sus poderes supremos”.

En este sentido, Torino Capital mantiene el escenario de permanencia de Maduro en el poder hasta 2018; no obstante, también creen que “la presión interna y externa continuará forzando al gobierno a que haga elecciones competitivas el año entrante” con una alta probabilidad de que la oposición llegue al poder en 2019.