Técnicamente es imposible saber por quién votó algún elector el 6 de diciembre, no obstante sí se puede conocer si algún ciudadano usurpó la identidad de otra para votar.

Después del reclamo de la oposición en el año 2013 contra los resultados de los comicios presidenciales sobrevenidos de ese año, la auditoría más importante del 6 de diciembre se centraba en la verificación de las incidencias de autenticación de los venezolanos que acudieron a votar.

La auditoría que se realizó entre el 14 y 18 de diciembre permitió comprobar que siete electores votaron en más de una ocasión, acción que no compromete los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), ni la adjudicación de diputados realizadas por las juntas electorales regionales.

¿Por qué se realizó una auditoría para comprobar si algún elector votó en más de una ocasión? ¿Fue una exigencia del Psuv para poder impugnar?
Como se ha explicado en otros post el reclamo básico de la oposición sobre los resultados de la elección presidencial de 2013 se centraron en los resultados de la auditoría de incidencias de autenticación de los electores que acudieron a votar en esa elección presidencial de 2013.

En esa oportunidad el CNE auditó –sin la presencia de los técnicos de los partidos políticos- la base de datos de incidencias de autenticación de la elección descubriendo que 247 huellas fueron consideradas como casos reales y comprobados de voto duplicado. Adicionalmente, el CNE reconoció –seis meses después de la elección presidencial- que el total de registros con posible problema de identidad en la base de datos del Sistema de Autenticación Integrado (SAI) fue de 9.272 que, al sumarlo a los 1.454 casos máximos de posibles votos duplicados, arrojaron un total máximo de 10.726 votos afectados por identidad negativa o voto múltiple.

En función de este precedente, los técnicos de la oposición le exigieron al CNE (hasta en tres ocasiones) que se fijara y acordara una revisión de las incidencias de autenticación de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.

Según los parámetros del SAI (uno por cada mesa de votación) el día de la elección cada vez que un elector fue a ejercer su derecho al voto los equipos biométricos del CNE debieron emitir una de las cuatro incidencias de autenticación posibles:

1.1. Coincidencia o match. Ocurrió cuando el SAI determinó que la huella del elector coincidió con una de la huellas previamente almacenadas para este elector.
1.2. No coincidencia o no match. El SAI determinó que ninguna de las huellas del elector coincidió con las huellas previamente almacenadas para ese elector.
1.3. Sin miembros superiores. El elector carecía de miembros o extremidades superiores.
1.4. Sin huellas registradas. El elector no tenía sus huellas registradas en la memoria de la máquina.

En distintas misivas al CNE los técnicos de la oposición argumentaron: “Es necesario auditar el conjunto de marcas que se producen durante la Verificación Biométrica de la identidad de los electores, correspondiente a aquellas cuyas huellas dactilares que ‘no hacen match’ con las registradas en el archivo de la Máquina de Votación, o que corresponden a electores que votaron y que no tenían huellas dactilares registradas previamente en el sistema”.

El fin último de esta revisión era conocer cuántas personas votaron en más de una ocasión, el total de registros que tienen posible problema de identidad en la base de datos del SAI, la cantidad máxima de posibles votos duplicados y la cantidad máxima de votos afectados por identidad negativa o voto múltiple y su impacto en los resultados de las elecciones.

¿Se auditaron las huellas de todos los electores que votaron el 6D?
No. En una reunión técnica celebrada el 26 de noviembre (en la que se acordó el protocolo de la revisión de incidencias de huellas), el rector Carlos Quintero explicó que era necesario tomar una muestra de los Centros de Votación para ejecutar la auditoria solicitada (Hasta ese momento los técnicos de la oposición exigían revisar todo el conjunto de incidencias)

No obstante, según la explicación ofrecida por Quintero, el repliegue de las 40.601 máquinas de votación y de los 40.601 equipos SAI y la descarga de la información necesaria para esta auditoría llevaría 58 días hábiles, lo que provocaría que la revisión culminara en febrero, después de que fuese instalada la nueva Asamblea Nacional, el 5 de enero.

Según el acuerdo alcanzado entre el CNE y los técnicos de los partidos políticos, la selección de la muestra de centros de votación y mesas que serán auditadas se realizará el 6 de diciembre a las seis de la tarde, al momento de ejecutarse la selección de las mesas en las que se debe realizar la auditoría posterior de Verificación Ciudadana Fase II.

¿La auditoría se realizó según lo acordado entre el CNE y los técnicos de los partidos políticos?
El domingo 6 de diciembre a las 6pm (coincidiendo con la hora legal del cierre de mesas) se realizó la selección aleatoria, con estratificación por las 87 circunscripciones de votación de los centros de votación a ser auditados después de los comicios. Esta selección sirvió para escoger la muestra acordada por la verificación de incidencias y la auditoría de Verificación Ciudadana Fase II.

Para esta revisión se seleccionaron aleatoriamente 238 centros de votación, incluyendo 738 Máquinas de votación e igual cantidad de equipos SAI. Entre el 14 y 18 de diciembre los técnicos de los partidos políticos auditaron la información biométrica de todos los electores que votaron en las mesas auditadas, concluyendo que 86,9% de los casos de No Match correspondían a electores que las máquinas no reconocieron (al comparar sus huellas contra los archivos digitales almacenados en los equipos).

Realizada toda la verificación y depuración de casos en la llamada zona gris de identificación se detectaron siete casos de electores que votaron dos veces, una vez con su propia cédula y otra con cédula distinta, indicando que no tenía extremidades superiores o usurpando otra identidad. Dos de esos casos votaron ambas veces en la misma mesa o en el mismo Centro de Votación.

¿Las personas que votaron más de una vez están detenidas?
En 2013 el CNE no informó al Ministerio Púbico de los 247 casos comprobados de usurpación de identidad. A la fecha no existe información oficial sobre la decisión que tomarán los rectores electorales y el ministerio público sobre estos siete casos comprobados de usurpación de identidad.

¿El Psuv participó de la auditoría de incidencias de autenticación?
A diferencia del proceso del año 2013 en esta ocasión los técnicos del Psuv tuvieron una participación muy activa del proceso de revisión de incidencias, llegando incluso a exigir que los dactiloscopistas presentes en la revisión (previstos para analizar los casos en que los equipos biométricos no lograran hacer match entre las huellas de los electores y los archivos almacenados) revisaran manualmente las huellas de todos los electores que votaron en los 238 centros de votación seleccionados.

¿El Psuv puede impugnar las elecciones con estos resultados?
Uno de los principales argumentos para impugnar un proceso de votación automatizado es que existan discrepancias numéricas entre los distintos documentos electorales. En este caso, la auditoría de Verificación Ciudadana fase II (realizada el viernes 11 de diciembre) que consiste en comparar la información de los comprobantes de votación, actas de escrutinio y transmisión de resultados al CNE no arrojó datos que indiquen que existen causales para impugnar la elección.

Esta verificación se realiza sobre una muestra de aproximadamente 1% de los centros de votación después de cada proceso electoral (151 colegios electorales en el caso del 6 de diciembre) y en todas las elecciones siempre ha demostrado la correspondencia de todos los documentos electorales (comprobante de votación, actas de escrutinio y totalización)