Los problemas del país se resuelven con “cambios radicales”, en esto coinciden 50% de los venezolanos.
En el último estudio de opinión pública realizado por la firma Keller & Asociados -difundido durante el foro Fedeuropa- concluye que sólo 14% de la población estima que no es necesario realizar cambios o reformas adicionales para resolver los problemas.
Al segmentar por preferencia política la interrogante: “¿Usted diría que en los próximos años habrá que hacer cambios radicales?”, se obtiene que 41% de las personas que se califican como “chavistas críticas” demandan cambios o reformas radicales; con este punto de vista concuerdan 69% de los ciudadanos identificados con la oposición.
Según Keller & Asociados, la promesa electoral de Manuel Rosales de repartir en forma de bono los recursos que genera Pdvsa es aprobada por 88% de los venezolanos. Paradójicamente, al evaluarse la aceptación de la tarjeta “Mi Negra” por identificación partidista, en el segmento de los “chavistas críticos” es donde mejor se posiciona la estrategia electoral de la oposición. 95% de las personas de este sector aprueban la entrega anual de los dividendos petroleros; en el caso de la oposición, hasta 78% de los antichavistas concuerdan con la principal promesa de Manuel Rosales.
Al hablar de la correlación de fuerzas entre el Presidente y el gobernador de Zulia, Keller & Asociados determina que Chávez descendió levemente (aproximadamente 3%) durante el año 2006, para ubicar su apoyo promedio en 49%.
La caída del Presidente contrasta con el incremento (aproximadamente de 5%) de las personas que se definen como contrarias a Chávez. Durante 2006 este subgrupo se puede identificar como representativo de 23% de la población.
En relación con la valoración de la situación del país, durante todo el año la percepción de un ambiente negativo se ha incrementado en 10%, ubicándose para septiembre en 39%.
A la par, el grupo de venezolanos que califica la situación como “positiva” descendió de 69% -a principios de febrero- hasta 60% en la actualidad.
Por último, el estudio concluye que 43% de los venezolanos se sienten “contentos, alegres y motivados”; mientras 45% de la población se califica como deprimida y preocupada”. Si se analizan estos resultados de acuerdo con la segmentación económica se descubre que el sentimiento de preocupación crece paulatinamente hasta ubicarse en 90% en las clases altas (A, B).